KANDAKE – Turbantes Africanos

Turbante Lavanda Éter

Lavanda Éter: Eterno verano en un turbante

Descubre la magia de Lavanda Éter, un turbante diseñado para envolver tu cabello con suavidad y delicadeza. Su tejido único, una mezcla de hilos ligeros con acabado satinado, cuida tus rizos y protege su forma natural, asegurando una sensación de frescura incomparable.

Lavanda Éter no es solo un accesorio; es un viaje a los recuerdos de verano, entre campos de flores, risas de infancia, y días llenos de luz. Inspirado en la ternura y la nostalgia de las vacaciones eternas, este turbante aporta una luminosidad especial a tu rostro, realzando tu belleza natural. ☀️

Con medidas aproximadas de 170 cm x 46 cm, es perfecto para crear diferentes estilos, mientras su ligereza y suavidad lo convierten en el aliado ideal para el cuidado de tu cabello.

18,00  14,40 

Envío inmediato
Hecho a mano
Pago con tarjeta

Descripción

🌿 Beneficios destacados:

  • Cuida y protege tus rizos gracias a su acabado satinado
  • Aporta frescura y ligereza a tu look.
  • Inspirado en la naturaleza y la dulzura del verano eterno.

Haz de Lavanda Éter el toque especial de tus días, porque cada detalle cuenta y tú mereces lo mejor

CUIDADOS DE PRODUCTO:

Para mantener la belleza y calidad de nuestros turbantes y accesorios, recomendamos seguir estos cuidados especiales:

  • Lavado: Lavar a mano con agua fría o tibia, máximo 30ºC.
  • Secado: Secar al aire libre, evitando el uso de secadoras.
  • Prohibido el uso de lejía: No utilizar blanqueadores o productos abrasivos que puedan dañar las fibras y colores.

Gracias a la calidad suprema de nuestras telas, estos cuidados asegurarán que tus turbantes mantengan sus colores vibrantes y su textura suave como el primer día, garantizando una larga vida útil con el mejor aspecto.

INFORMACIÓN ADICIONAL:

ABSOLUTAMENTE, TODOS LOS ARTÍCULOS ESTÁN HECHOS ARTESANALMENTE A MANO. CUALQUIER PEQUEÑA IMPERFECCIÓN ES FRUTO DE ELLO.

Información adicional

Talla Única

Talla única

Cómo Cuidar, Lavar y Almacenar

  • Lavar a Mano: Siempre es recomendable lavar el turbante a mano para preservar la calidad de las telas. Usa agua fría o tibia (máximo 30°C).
  • Detergente Suave: Utiliza un detergente suave o específico para prendas delicadas. Evita productos abrasivos que puedan dañar las fibras.
  • No Usar Lejía: Evita el uso de blanqueadores o lejía, ya que pueden afectar los colores vibrantes y las fibras naturales de los turbantes.
  • No Frotar en Exceso: Frota suavemente al lavar para evitar desgastar la tela, especialmente si es seda o satén.
  • Aclarado Completo: Asegúrate de enjuagar bien el turbante para eliminar cualquier residuo de detergente.
  • Secado al Aire Libre: Deja secar tu turbante al aire libre, preferiblemente en una superficie plana para evitar que se deforme.
  • Evitar la Luz Directa del Sol: No lo expongas directamente al sol durante largos periodos, ya que puede desvanecer los colores.
  • No Usar Secadora: Evita el uso de secadoras, ya que el calor excesivo puede dañar las fibras naturales y reducir la vida útil del turbante.
  • Secado en Sombra: Si es posible, cuélgalo en un lugar sombreado para conservar mejor los colores y la textura.
  • No Retorcer: No retuerzas el turbante para escurrirlo; esto podría deformarlo. En su lugar, presiona suavemente con una toalla para absorber el exceso de agua.
  • Evitar Exposición Prolongada al Sol: Los rayos UV pueden desvanecer los colores con el tiempo. Guarda tu turbante lejos de ventanas o luz directa.
  • Lavar con Colores Similares: Lava tu turbante con prendas de colores similares para evitar transferencias de color no deseadas.
  • Usar Protector de Color: Si es posible, utiliza productos específicos que ayuden a mantener los colores vibrantes por más tiempo.
  • Evitar Productos Químicos Fuertes: Perfumes, desodorantes o productos químicos fuertes pueden manchar o dañar los colores. Aplica estos productos antes de ponerte el turbante.
  • Planchar con Cuidado: Si decides planchar el turbante (solo si es necesario), hazlo a baja temperatura y coloca un paño entre la plancha y la tela para protegerla.
  • Moldear Después del Lavado: Después del lavado, dale forma suavemente mientras aún está húmedo para que mantenga su estructura original.
  • Evitar Pesos Excesivos al Guardarlo: No coloques objetos pesados sobre tu turbante cuando lo almacenes, ya que esto puede aplastarlo y deformarlo.
  • Revisar Regularmente las Costuras: Si notas alguna costura floja, refuérzala antes de que se agrave el daño. Esto ayudará a prolongar su vida útil.
  • Usar Almohadillas Suaves al Guardarlo: Si prefieres mantenerlo enrollado, coloca algo suave dentro (como papel tisú) para ayudar a mantener su forma sin aplastarlo.
  • No Sobrecargarlo con Accesorios Pesados: Evita agregar accesorios pesados que puedan estirar o deformar la tela con el tiempo.